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Racistas, neonazis y grupos de odio e intolerancia contra Obama.

    La histórica victoria del Senador Barack Obama en las elecciones primarias del Partido Demócrata fue acogida con entusiasmo en Norte America y en el mundo por lo que simboliza en cuanto a progreso racial y unidad. Sin embargo, también ha desencadenado un incremento de la actividad racista y de los supremacistas blancos, principalmente en Internet.

Tanto organizaciones que hacen seguimiento de los grupos de odio, como los propios líderes de esas formaciones, desde el mismo momento en que el senador por Illinois se hizo con la nominación a candidato presidencial, grupos de skin neonazis, y segregacionistas han visto incrementada el número de visitas a sus páginas de internet, así como han experimentado un aumento en la incorporación de nuevos miembros.

La posibilidad de que Estados Unidos tenga el primer presidente negro de la historia ha enervado los ánimos de los sectores racistas.

Billy Roper, líder del grupo conocido como la Revolución Blanca del Arca de Russellville, a sus 36 años afirmó “no haber visto tanta furia desde hace mucho, mucho tiempo. “Nada ha fomentado el despertar de los complacientes norteamericanos blancos desde que son conscientes de que pueden tener un presidente negro”.

Este tipo de organizaciones han tendido históricamente a exagerar su influencia, como parte de su estrategia intimidatoria, y se han negado a ofrecer datos sobre el número de militantes de que realmente disponen, así como a permitir a los periodistas asistir a sus reuniones. Sus líderes reconocen encontrarse en minoría, aunque los expertos coinciden en señalar que sus exigencia son más que una simple exageración.

“Lo cierto es que detectamos una explosión del sentimiento de odio en Internet” afirma Deborah Lauter, la directora general del departamento de Derechos Civiles de la Liga Antidifamación, cuyo cometido es hacer seguimiento de los grupos de odio y que afirma que “probablemente hay miles de páginas que estén promoviendo la intolerancia en este momento”. Añade que ni siquiera es capaz de dar una cifra sobre el número de portales, ya que el crecimiento es tan rápido que resulta imposible hacer seguimiento de todas.

Los grupos neonazis y del poder blanco saben que no tienen capacidad para hacer descarrilar la candidatura de Obama, por lo que en vez de intentarlo van a concentrar sus esfuerzos en sacar toda la ventaja posible del escenario que se ha creado y explotar todo su potencial para reclutar nuevos militantes.

Obama ha realizado grandes esfuerzos para minimizar el tema de la raza en la campaña presidencial. Cuando le preguntan por odio y división, el responde en términos de unidad entre negros y blancos. Decidió no solo rechazar, sino denunciar al apoyo que le había ofrecido el líder de “Nación Islam”; y decidió abandonar la iglesia a la que había pertenecido por largo tiempo, cuando su reverendo, Jeremiah A. Wright Jr, habló del racismo y la opression de los “Estados Unidos de la América Blanca”.

A principios de junio, Obama presentó una página web dedicada a desmentir y neutralizar los falsos rumores que sobre él han vertido los traficantes de odio en la red. Afirmaciones del tipo de que Obama es musulmán, que sus libros contienen afirmaciones racistas, o que su esposa utilizó la palabra "whitey"-forma despectiva de referirse a los blancos- . Su jefe de campaña afirmó que su intención es mantenerse a la ofensiva y permitir que cuajen mensajes falsos y deshonestos sobre l candidato.

Sin embargo, en una página web gestionada desde un domicilio particular en West Palm Beach, Fla. Don Black pasa 16 horas al día, leyendo centenares de mensajes despectivos colgados en Stormfront.org, una web cuyo slogan es “Orgullo Blanco en Todo el Mundo”. Black es el antiguo dirigente del Ku Kluz Klan, que creó en 1995 un portal que sirviera de centro de operaciones y encuentro del movimiento del poder blanco. Los datos hablan por sí solos, en 2002 esa página web contaba con tan solo unos pocos miles de visitantes al día, en la actualidad cuenta con 40 mil visitantes, 54 foros de internet diferentes, más de 40 moderadores.

Los mensajes se quejan de que Obama representa el final del “gobierno blanco” y el despertar del “multiculturalismo”. Temen que promoverá programas de acción positiva a favor de las minorías, apoyará la inmigración ilegal, y ayudará a que los blancos se conviertan en “una nueva minoría”.

Black afirma que no para de recibir mensajes vía email de gente enfurecida solo de pensar en la posibilidad de que Obama sea elegido. “Hasta ahora los blancos hemos considerado que nuestro gobierno era parte de nosotros. Obama representa la evidencia de que eso no será nunca más así, esto está generando miedo en mucha gente que ni siquiera se consideraba racista, pero que ahora se sienten atraídas por nuestro campo”.

Casi todos los dirigentes del movimiento del poder blanco confirman el aumento de militancia. David Duke, antiguo miembro de la Cámara de Representantes, por Louisiana, y un viejo defensor de la segregación racial, afirmó que su página web ha doblado el número de visitas, y cada vez recibe más invitaciones para hablar en actos públicos.

Dan Hill, líder de un grupo extremista en Michigan, afirmó que sus seguidores están más deseosos de “adoptar medidas más serias” y planea movilizaciones en contra de los políticos y la inmigración. Por su parte, Roper, dice recibir más de 10 peticiones por día para ingresar en su organización, lo que dobla la media habitual.
Las organizaciones especializadas en el seguimiento de los grupos de odio, confirman que en los últimos meses se ha experimentado una tendencia al alza. El Southern Poverty Law Center estima que desde el año 2000 esos grupos han crecido hasta un 50% agitando en contra de los inmigrantes con discursos incendiarios. El KKK se ha divesificado regionalmente y ahora cuenta con 150 sucursales en 34 estados. “Nuestro negocio funciona mejor en tiempos de crisis, con el petróleo y la vivienda subiendo, y la posibilidad de que un negro sea presidente” afirma Ron Doggett, líder de una organización supremacista de Richmond que lleva por nombre EURO.
A lo largo de los actos de campaña se han producido incidentes protagonizados por este tipo de grupos. Camisetas que caricaturizan a Obama como un simio, o que instan a los “blancos a despertar”. El debate está servido. Los dirigentes racistas debaten de cómo sacar el mayor partido posible a esta etapa. También desprecian al candidato republicano por sus posiciones sobre la guerra de Irak .

“Obama for president” prepara el terreno para “David Duke for President”, que ya participó en 1988 en una campaña presidencial obteniendo tan solo el 1% de los votos. “Los blancos acabarán por darse cuenta de que es necesario defender nuestra herencia, y percibirán que represento el próximo paso que por lógica debemos dar”.

Existe otra posibilidad, que hará que los supremacistas blancos desprecien incluso con mayor fervor al candidato demócrata, Obama ganará, y entonces será demasiado tarde para hacer nada, tomará posesión de su cargo, y se instalará la percepción multicultural se instalará. Nada relevante ocurrirá y nuestros puntos de vista carecerán de cualquier perspectiva de futuro”.
© The Washington Post